miércoles, mayo 02, 2007

Luna llena, luna inquieta

Sentir que no hay camino, que sola en el olvido me quedé esperando a que pasara ese tren que por la estacion no paró. Perdida en el infinito, en un mundo despojado de cualquier manto abrigado.

Nunca pensé que el infierno se encontrase tan cerca de mi, tan cerca que me arde y me descoloca, me atonta, y me confunde. Dolorida, abandonada. ¿Por qué cuando más te necesito siempre te vas tan lejos? No me comprendo a mi misma, tengo ganas de llorar, aunque deberia estar rebosando felicidad. Sueños desvanecidos, futuro incierto que muestra un camino cada vez mas estrecho, por el que apenas se puede caminar, rocoso, intransitable. Estar rodeada de tanta gente y pensar que estoy sola, sola, sola... sola conmigo misma, mi peor enemigo.

Lloro, no se hacer otra cosa. Seré debil, pero no encuentro otra salida a mi frustracion. ¿Tan mala soy? que alguien me conteste ya que yo no soy capaz de hallar respuesta alguna a la telaraña que se teje en mis entrañas...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para empezar saludar, es bonita esa expresión de la dureza de la soledad, pero también hay que decir que la soledad bien tratada es muchas veces mejor que el estar acompañado por alguien que te hace sentir sola aunque físicamente esté ahí. Como respuesta a si eres tan mala, me temo que no, pero la gente no es capaz de reconocerte tus méritos, que por otra parte seguro que son muchos, no te martirices por ello. Para lo de que alguien te ayude a hallar respuestas que tienes internas, pregunta a algún amigo tuyo que haga razonamientos válidos, que sea capaz de ver la mayor parte de las cosas de otra forma para ayudarte a ver detalles que tú por ti misma no eres capaz, quizá por falta de experiencia en esas cosas. Esa persona puede tener respuestas que no te daría nadie que tratas habitualmente, y te ayudaría bastante si se lo propones. Seguro que no pone objeciones, además, diría que puede ser un solitario que se ha sentido solo alguna vez, y que por ello puede responderte de forma que otros nunca harían. Será capaz de buscar respuesta aunque no la sepa, pero te buscará un razonamiento deductivo que te ayudará muy gratamente. Si conoces a alguien así, no tengas miedo en preguntarle, seguro que estará encantado de poder ayudarte y casi seguro que se lo agradecerás. Ánimo y suerte.

Anónimo dijo...

Decir también que se me ha olvidado antes, llorar no es de débiles, y no por llorar te tienes que sentir débil, ni mucho menos, si te apetece llora, que algo se aprende aunque parezca que no. Adios.